El encuentro fue una reedición de la final de la temporada pasada, y de nuevo el marcador se decantó a favor de los locales, gracias a la interesante labor colectiva que implantaron en la segunda mitad.
Hasta cinco jugadores del Caracas terminaron con doble dígitos, y contaron incluso con un héroe anónimo, el joven Windi Graterol, quien emergió de la banca en el último cuarto y anotó nueve puntos con dos rebotes en seis minutos de juego, en la escapada definitiva.
"Vine concentrado a la cancha, tengo que aprovechar las pequeñas oportunidades que tengo para demostrar que puedo estar allí", señaló tras el triunfo la joven promesa.
La anotación compartida fue tal, que el máximo anotador por los saurios fue Juan Herrera, con 16 puntos, que ni siquiera jugó el último cuarto. Le siguió el "Tsunami" Luis Bethelmy con 15 tantos y 11 rebotes, Jesús Centeno 14, Kevin Freeman 12 y Eddie Elisma 11.
"Los primeros dos cuartos fueron malos, no estábamos encajando en el sistema de juego, pero luego aplicamos lo que mejor sabemos hacer: correr y defender, y se nos dio la victoria", declaró el "zancudo" Centeno.
El técnico Néstor Salazar también se mostró satisfecho por la victoria: "Eso (el esquema) se va a ir soltando poco a poco, no es fácil porque los importados aún se están acostumbrando a nuestro juego, pero sabemos que lo que nos da resultados es la velocidad, es nuestra identidad", confesó.
ESTABA PAREJITO
La tropa furrera, renovada con las transacciones que realizó en el receso, plantó resistencia en la primera mitad, pues perdió el tramo inicial 26-18, pero se fue al descanso arriba 46-47.
Rafael Guevara fue el factor desequilibrante de los zulianos, que tenía en la banca al estadounidense Ruben Nembhard, aún sin poder jugar porque no están listos los papeleos para su naturalización. Si se tarda en demasía, este mismo fin de semana será inscrito de una vez como importado.
Pese a ello, el ataque de la gaita se fue diluyendo con el transcurrir de la segunda mitad. Cuando Caracas pisó el acelerador, guiados por Jesús Centeno, no hubo forma de frenar el ataque. Al terminar el tercer período ya la pizarra anunciaba 74-66.
En el cuarto decisivo los visitantes intentaron regresar, pero nunca pudieron pudieron rebajar de seis puntos. El detonante se produjo faltando 3:55 para el final, cuando Alejandro "Tapipa" Barrios fue expulsado por los árbitros al cometerle una dura infracción al piloto estadounidense Jason Crowe; acción que derivó en varios empujones entre jugadores y lanzamiento de objetos al tabloncillo. Después de esa ausencia, el partido no tuvo más historia.
"Siempre le digo a los aficionados lo mismo, que vengan a apoyar al equipo con gritos y aplausos, pero comprar una entrada no les da derecho a lanzar lo que sea a la cancha. Creen que hacen bien, pero nos perjudica como equipo local, y hasta pueden lesionar a nuestros jugadores", reflexionó Néstor Salazar en la conclusión del cotejo.
El "show" Guevara terminó como el mejor de la gaita con 25 puntos y 7 rebotes, escoltado por el norteamericano Rob Sanders con 15 y 5 capturas.
Cocodrilos viajará ahora a Barquisimeto para enfrentar a Guaros el fin de semana, mientras la tropa de Gustavo García volverá a casa para recibir a Trotamundos.
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