Los insulares defendieron con clase y aguantaron el empuje naval para ganar con autoridad en el "clásico oriental"
Guaiqueríes de Margarita pulverizó el ataque de Marinos de Anzoátegui e impuso una defensa casi indescifrable en el gimnasio Ciudad de La Asunción para vencer a placer 76-59 al Acorazado en el cuarto enfrentamiento entre ambos clubes en el Súper Clásico Oriental.
Con el laurel, los dirigidos por Julio Toro demostraron la razón por la cual son el mejor equipo defensivo de la Liga Profesional de Baloncesto al permitir 77 puntos por juego y mejorar a 12 éxitos y 5 caídas su balance como locales.
A su vez, el Acorazado cae por tercera vez corrida después de la pausa del Juego de Estrellas y la cifra de 59 puntos encestados en el partido contra la tribu es la más baja en la escuadra oriental con la denominación Marinos.
El registro de menos tantos en un juego para los orientales es cuando la divisa se llamaba Caribes de Anzoátegui y anotaron 57 puntos el 26 de junio de 1976, frente a los Ahorristas del Caracas (hoy Cocodrilos) en Puerto La Cruz.
Los cuatros parciales del cotejo fueron dominados en su totalidad por los insulares 24-18, 48-30, 64-46 y 76-59 para llevarse el triunfo que coloca la serie particular 3-1, todavía a favor de la nave portocruzana.
Marinos deja su record nivelado en 8-8 cuando juega de visitante.
El dominicano Kelvin Peña aportó 14 puntos, Carlos Cedeño encestó 13 y Chris Jackson totalizó 10 unidades con 13 rebotes por los insulares.
Por Marinos, el debutante André Emmet convirtió 13 dianas. El capitán de Marinos, Axiers Sucre, anotó 13 tantos y tomó 6 rebotes. Michael Gale, el actual Jugador de la Semana, contribuyó con 9 puntos.
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