Para la temporada que se avecina, Marinos aspira a sumar dos nuevos jugadores en calidad de criollos, gracias a su nacionalización: el estadounidense Jermaine Walker y el puertorriqueño Raúl Orta.
"Los trámites de ambos están bien adelantados y creemos que arrancarán la temporada sin problemas", añadió Patino.
Walker, sempiterno refuerzo del elenco naviero, cumple con la normativa exigida por la LPB, de tener al menos cinco temporadas con el mismo club como refuerzo, para ser candidato a nacionalizarse.
El alero vino por primera vez a Marinos en 2003 y lo ha hecho ininterrumpidamente desde ese entonces hasta la campaña de 2009, aunque en esta solo cumplió el formalismo de tener un juego con el club.
Orta, por su parte, es de madre venezolana y por ello tiene el chance de optar por la nacionalidad criolla.
El jugador de 24 años es un escolta que también puede ayudar con la conducción. En Puerto Rico suma experiencia con los Leones de Ponce y en su última incursión tuvo averages de 9,5 puntos y 2,6 rebotes, en un total de 30 partidos, con 41% de acierto en triples.
Los entrenamientos de Marinos tendrán lugar en el Luis Ramos, de Puerto La Cruz, su hogar natural. El Acorazado abrirá la temporada de 2010 el 16 de febrero, frente a Gigantes de Guayana.
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